domingo, 30 de noviembre de 2014



CONSUMIR, PREFERIBLEMENTE, ANTES QUE SE PUDRA.


Inadaptado social
Un empresario fue denunciado por enriquecimiento lícito. Perdió status, las mujeres dejaron de perseguirlo, su círculo íntimo le quitó la admiración y lo expulsaron, primero del club y luego del partido.

Karma.
El día antes que Alfredito cumpliera dos años ocurrió un acontecimiento que sería recordado por siempre. Se animó a soltar las primeras palabras que sus papás interpretaron como comprensibles, entre otros balbuceos, creyeron oír: -¡Quedo tutú…!-
Como todo matrimonio que lucho durante años por la adopción se dispusieron a hacer realidad cada uno de sus caprichos. Papá corrió presuroso a comprar un autito plástico de fórmula uno. Mamá, quién no quiso ser menos, le compró un pollerín de tul.


Aura impecable
Él mismo se considera un alma pura, un ser transparente, el problema es que nadie lo ve.
  
Letras más, letras menos
-Mida sus palabras. Le imputó el otorrinolaringólogo al electrocardiografólogo porque éste lo había llamado, desvergonzadamente, puto.



viernes, 21 de noviembre de 2014


NO RETORNABLE.


Colonia Aranguren
El poblado tiene pocos habitantes y demasiadas sombras. Los viejos viven en él pero trabajan en los campos aledaños. Los jóvenes, se van a las grandes ciudades por estudios o en busca de oportunidades. Este fin de semana falleció el único empleado del cementerio. El cartel escrito de apuro en su portal informaba: “Hasta nuevo aviso, permanecerá cerrado por duelo”.

Sospechosa
-El tamaño no importa…, le dije, pero ella igual se hizo los pechos…

Sí, mi yo

No estoy conforme con lo que veo en el espejo, está lleno de imperfecciones y tiene mala cara. Como será que hasta el mismo me lo ha dicho.



miércoles, 5 de noviembre de 2014

CIUDAD SONORA



Ésta es una ciudad ruidosa.
Es una ciudad sonora.
No insonorizada, es sonora.
Pero a veces no.

Pim pam pum, a veces si, a veces no.
Rum rum rum, casi siempre.
Tap tiqui tac, dicen también.
Los que oyen bien, otros no.

El viento suena pocas veces.
(Y también las gotas de lluvia).
En los árboles, en las bolsas de nylon
y en la basura suelta por doquier, siempre.

Resuena el murmullo seco de la muchedumbre
Que a veces es poca, otras mucha.
Pero siempre suena, se oye, se escucha, se ve.
Dice siempre, el eco en la noche.

Vehículos, fábricas, escuelas.
Ruido de vehículos, de escuelas.
Con gente adentro, suelta.
Pero adentro, sin poder salir afuera, no libre.

El sonido vive en todos los barrios
A veces música, otras veces no.
Suena casi siempre.
Dentro de las iglesias y afuera.
En las oficinas y en los bares.
Adentro, hasta cierta hora, casi siempre.

El ruido subyace en ésta ciudad que late.
Y la gente no se da cuenta.
La gente es ruidosa, siempre.
Pero a veces no, los domingos de verano no.

Y menos a la hora de la siesta.